
Camino es un espacio educativo donde poner en práctica otra mirada hacia la infancia, la educación que queremos dar y recibir, y donde plasmar otra forma de vivir. Es una apuesta.
Las personas que conformamos este lugar creemos en la importancia del cuidado de la Infancia y el valor de la prevención como factor primordial para un mayor bienestar y desarrollo personal en todas sus esferas.
En las mañanas es un espacio educativo homologado y durante las tardes y fines de semana un espacio multidisciplinar con actividades y talleres afines al proyecto donde continuar aprendiendo y gozando abierto a todo el público grande y pequeño en general.
Las familias tenemos un papel fundamental en Camino. Somos la base del proyecto, el eje de cuidados de las criaturas y, por ende, tenemos el lugar que nos merecemos para seguir desarrollando y gozando nuestro vínculo como sistema vivo y autónomo. Por ello, el espacio está abierto a las familias en cualquier momento, con un área de coworking y acompañamiento sociolaboral (en especial a las mamás), junto con más acciones sociales y de trabajo en red con otros colectivos de la zona.
Desde las ventanas del espacio vemos el Parque Regional del Sureste y sus lagunas, y desde la puerta de entrada caminando son apenas 6 metros hasta llegar a él. Queremos respirar la Vega y aprender de ella. Y cuidarla. Por eso, nuestra intención es tejer relaciones y compromisos con las huertas ecológicas y granjas de animales que la componen, además de la colaboración regular de organismos asociativos que promueven una participación y cuidado de nuestro entorno más natural y vivo. Esta será una base importante de nuestra educación diaria para trabajar de manera transversal las propuestas educativas.
Y recuperar las calles, el pueblo… caminar hacia la biblioteca municipal, conocer los comercios de la población, sus gentes, oficios o asociaciones.
Y encontrar nuestro camino.
Camino: acción educativa, acción social.